Como hemos podido darnos cuenta, la Edad Media fue una época en que los cultos secretos y las doctrinas esotéricas proliferaron, propagados por numerosas organizaciones iniciáticas. Citemos, a ese respecto, las sociedades secretas que agrupaban a los alquimistas, cuyas doctrinas y prácticas no dejaron de desarrollarse durante todo ese período, a pesar de las repetidas condenas de la Iglesia.También hay que mencionar a los rabinos cabalistas, que se agruparon en una suerte de escuelas, pequeñas capillas cerradas. El sentido etimológico de la palabra Cábala es «tradición». Ese esoterismo hebraico, cuya influencia había de ser tan grande sobre numerosos pensadores cristianos, tiene remotas raíces en las doctrinas puramente judaicas y también en las otras tradiciones, principalmente las ideas gnósticas: las obras de los cabalistas son una especie de depósito en el que han venido a acumularse los residuos de los sistemas teosóficos más diversos. Había una Cábala práctica, suerte de enciclopedia de conocimientos mágicos de todas clase, junto a diversos procedimientos que permitían obtener el éxtasis místico, y aun llegar a poner a algunos sujetos en trances hipnóticos. Pero había sobre todo una Cábala especulativa, que interpretaba alegóricamente los textos sagrados, utilizando diversas técnicas de permutación de letras. (Gematria, Notarikón, Temurah, Teruf), y que intentaba penetrar los más profundos misterios de la Creación (Maaseh heresit,«Historia del Génesis») y de la constitución del Universo (Maaseh Merkabah, «Historia del carro celestial»). Los dos textos de base de las especulaciones cabalísticas eran el Sefer( o Sepher) Yetsirah («Libro de la Formación»), sin duda del siglo VIII, y el Séfer - ha - Zohar («Libro del Esplendor), redactado en España hacia fines del siglo XIII; esta última obra ejerció, sobre todo a partir del siglo XVI, considerable influencia sobre casi todas las doctrinas esotéricas que vieron la luz.No podemos resumir, siquiera brevemente, el inmenso cuerpo de doctrinas que forman las especulaciones cabalísticas: nos permitimos remitir a las obras especializadas (Ver bibliografía) . Sin embargo, he aquí el principio de base, enunciado por J.Boucher [9]:«Dios puede ser considerado en sí o en su manifestación. En sí, antes de toda manifestación, Dios es un ser indefinido, vago, invisible, inaccesible, sin atribución precisa, parecido a un mar sin orillas, a un abismo sin fondo, a un fluido sin consistencia, imposible de conocer por ninguna razón, por consiguiente, de ser representado, sea por una imagen, sea por un nombre, sea por una letra, ni siquiera por un punto. El menos imperfecto de los términos que puede emplearse sería el Sin fin, el Indefinido o Ain Sof, que no tiene límite, o Ain el No - Existente, el No-ser.«En cuanto Dios se manifiesta se hace accesible, cognoscible; se le puede nombrar; y el nombre que se le da se aplica a cada manifestación o exteriorizació n de su ser. El Ain Sof, el Ain se manifiesta de diez maneras por o en las sefirot [sephirot]. Cada una de éstas, la Corona, la Sabiduría, la Inteligencia, la Gracia, la Fuerza, la Belleza, la Victoria, la Gloria, el Fundamento y la Realeza, constituye un modo especial de revelación o de notificación del Ain Sof y permite nombrarlo. Cada círculo, limitación o determinación del Ain Sof, es una sefirah...«La Cábala considera también a Dios bajo la forma del Adán celeste, el Adán Quadmón, y localiza las sefirot en cada uno de sus miembros, aplicando la ley de los contrarios y la ley sexual»De ahí el diagrama conocido con el nombre de árbol de las Sefirot.
Los Templarios y las Sociedades Secretas
Como hemos podido darnos cuenta, la Edad Media fue una época en que los cultos secretos y las doctrinas esotéricas proliferaron, propagados por numerosas organizaciones iniciáticas. Citemos, a ese respecto, las sociedades secretas que agrupaban a los alquimistas, cuyas doctrinas y prácticas no dejaron de desarrollarse durante todo ese período, a pesar de las repetidas condenas de la Iglesia.También hay que mencionar a los rabinos cabalistas, que se agruparon en una suerte de escuelas, pequeñas capillas cerradas. El sentido etimológico de la palabra Cábala es «tradición». Ese esoterismo hebraico, cuya influencia había de ser tan grande sobre numerosos pensadores cristianos, tiene remotas raíces en las doctrinas puramente judaicas y también en las otras tradiciones, principalmente las ideas gnósticas: las obras de los cabalistas son una especie de depósito en el que han venido a acumularse los residuos de los sistemas teosóficos más diversos. Había una Cábala práctica, suerte de enciclopedia de conocimientos mágicos de todas clase, junto a diversos procedimientos que permitían obtener el éxtasis místico, y aun llegar a poner a algunos sujetos en trances hipnóticos. Pero había sobre todo una Cábala especulativa, que interpretaba alegóricamente los textos sagrados, utilizando diversas técnicas de permutación de letras. (Gematria, Notarikón, Temurah, Teruf), y que intentaba penetrar los más profundos misterios de la Creación (Maaseh heresit,«Historia del Génesis») y de la constitución del Universo (Maaseh Merkabah, «Historia del carro celestial»). Los dos textos de base de las especulaciones cabalísticas eran el Sefer( o Sepher) Yetsirah («Libro de la Formación»), sin duda del siglo VIII, y el Séfer - ha - Zohar («Libro del Esplendor), redactado en España hacia fines del siglo XIII; esta última obra ejerció, sobre todo a partir del siglo XVI, considerable influencia sobre casi todas las doctrinas esotéricas que vieron la luz.No podemos resumir, siquiera brevemente, el inmenso cuerpo de doctrinas que forman las especulaciones cabalísticas: nos permitimos remitir a las obras especializadas (Ver bibliografía) . Sin embargo, he aquí el principio de base, enunciado por J.Boucher [9]:«Dios puede ser considerado en sí o en su manifestación. En sí, antes de toda manifestación, Dios es un ser indefinido, vago, invisible, inaccesible, sin atribución precisa, parecido a un mar sin orillas, a un abismo sin fondo, a un fluido sin consistencia, imposible de conocer por ninguna razón, por consiguiente, de ser representado, sea por una imagen, sea por un nombre, sea por una letra, ni siquiera por un punto. El menos imperfecto de los términos que puede emplearse sería el Sin fin, el Indefinido o Ain Sof, que no tiene límite, o Ain el No - Existente, el No-ser.«En cuanto Dios se manifiesta se hace accesible, cognoscible; se le puede nombrar; y el nombre que se le da se aplica a cada manifestación o exteriorizació n de su ser. El Ain Sof, el Ain se manifiesta de diez maneras por o en las sefirot [sephirot]. Cada una de éstas, la Corona, la Sabiduría, la Inteligencia, la Gracia, la Fuerza, la Belleza, la Victoria, la Gloria, el Fundamento y la Realeza, constituye un modo especial de revelación o de notificación del Ain Sof y permite nombrarlo. Cada círculo, limitación o determinación del Ain Sof, es una sefirah...«La Cábala considera también a Dios bajo la forma del Adán celeste, el Adán Quadmón, y localiza las sefirot en cada uno de sus miembros, aplicando la ley de los contrarios y la ley sexual»De ahí el diagrama conocido con el nombre de árbol de las Sefirot.
Vaticano publica la verdadera historia del final de los Templarios
Un estuche de una gran calidad artística y objeto de deseo para historiadores y coleccionistas pero sobre todo unos documentos que permiten a la Iglesia aclarar, de una vez por todas, el comportamiento de Clemente V durante el juicio contra la Orden del Temple. La crítica histórica que acompañará el volumen con todos los documentos abraza la afirmación que Clemente V "absolvió" al Gran Maestre del Temple, Jacques de Molay, y los principales dirigentes de la Orden".
Pero que no pudo hacer nada más por ellos, ya que "comprendió que para evitar un cisma en la Iglesia era necesario sacrificar la supervivencia de la Orden". Una absolución que rehabilita así la imagen de los Templarios, acusados de traición, herejía y sodomía. Aunque de nada sirvió la absolución papal pues Felipe el Hermoso consiguió en 1312 que el Concilio de Vienne decretara en la práctica la disolución de la Orden y el 18 de marzo de 1314,y Molay y los suyos acabaron quemados a la hoguera.
"Tras la investigación realizada en Poitiers, el Papa absolvió a los templarios de las acusaciones de herejía", escriben los historiadores de los Archivos Vaticanos.
Aun así, "la supervivencia del Orden se hizo imposible" pues "Clemente V, "después de meses de duras batallas políticas, comprendió que para salvar a la Iglesia de un posible cisma era necesario sacrificar a los templarios".
La historiadora que descubrió el valioso pergamino de "Folio de Chinon", Barbara Frale, asegura que su gran importancia a nivel histórico "porque permite corregir una serie de juicios sobre la Orden de los Templarios y el papa Clemente V que la historia ha arrastrado y que eran inexactos". Durante siglos, añadió la joven historiadora, de 34 años, "se aseguró que el Papa estuvo de acuerdo y consintió la destrucción de la Orden, y este documento prueba que no fue así".
En el pergamino de Chinón se lee que el Gran Maestre "interrogado cuidadosamente sobre la acusación de sodomía, sobre los ídolos con forma de cabeza y sobre los besos inmorales, dijo que no sabía nada".
En este documento, los tres cardenales, representantes del Papa, señalaban que el Gran Maestre "repudiaba cualquier herejía y pedía humildemente el beneficio de la absolución".
Ante estas declaraciones, los tres cardenales pidieron para Molay, en nombre del Papa, "la absolución" y recomendaron acogerle "en la unidad de la Iglesia y restituirle a la comunión de los fieles y a los sacramentos eclesiásticos".
Jeques árabes, diseñadores de moda y las principales bibliotecas del mundo ya han reservado una de las 799 copias del "Processus" que saldrán a la venta. El ejemplar número 800 será regalado al Papa Benedicto XVI, como se informó hoy durante la presentación.
El "Procesus contra Templarios" incluye además las fieles reproducciones de los pergaminos con los interrogatorios realizados por la comisión papal a los templarios y las notas escritas por Clemente V y sus colaboradores. También contiene los tres sellos pertenecientes a los cardenales Pietro Colona, Pierre de la Chapel y Bernfer Fredol, que fueron los encargados por el Pontífice de realizar los interrogatorios.
Para la historiadora Barbara Frale, descubridora del "Folio de Chinon", la publicación del "Procesus contra Templarios" no es "un punto final" en la historia de la Orden "sino que abre un sin fin de nuevas investigaciones". Eso sí, "cierra muchas de las puertas, encontradas en muchos libros históricos y novelas, sobre el carácter esotérico y herético de los templarios".
El castillo de Chinon
Sin embargo esto no termino allí. El Rey de Francia continuó insistiendo en castigar duramente a los sospechosos de herejía y blasfemia. Dos años mas tarde y a pesar de la decisión del Papa, Felipe el Hermoso encarceló a De Molay, al tesorero de la Orden, Geoffrey de Charney y al resto de los Caballeros Templarios. De Molay y Charney, calculando los años que deberían sufrir encarcelados, flagelados y torturados, decidieron dar un paso drástico y retractarse de sus Pseudo-confesiones.
Esto enfureció al Rey de Francia y ese mismo DIA, 18 de Marzo de 1314, ordeno matarlos, siendo quemados en la hoguera en L'ille de France, Paris. Un detalle interesante de ese evento es el que al ser subido a la hoguera y haciendo notar la injusticia del acto, De Molay maldijo al Rey Francés Felipe el Hermoso y al Papa Clemente V. El Papa murió un mes después, de disentería y el 29 de Noviembre del mismo año, el rey se mato por una caída del caballo. Más aun, la leyenda dice que De Molay maldijo a la casa real francesa hasta la "treceava generación", justamente la de Luis XVI, muerto en la guillotina durante la Revolución Francesa.
Una copia original del pergamino de Chinon esta guardada en el Archivo Secreto del Vaticano. El pergamino original/original "desapareció" durante tres siglos. Resulta que fue archivado en un lugar erróneo del Archivo del Vaticano, hasta que en el año 2001, una joven investigadora italiana, Bárbara Frale, lo encontró en uno de los miles estantes de la Biblioteca y Archivos Secretos del Vaticano.
El actual Papa Benedicto XVI, siendo Prefecto Amerito para la Conservación de la Doctrina de la Fe, decidió hacer publico este documento e incluso dar la posibilidad de ser adquirido, por la módica suma de 5900 Є, como lo señalé anteriormente. El Pergamino de Chinon es un demoledor documento que el propio Vaticano saca a la luz. Un detalle muy significativo, que viene a probar lo que durante todos estos siglos han mantenido la mayoría de los historiadores y los propios templarios, que las acusaciones contra la Orden del Temple fueron falsas y motivadas única y exclusivamente por una conspiración.
Cuales son entonces las similitudes o diferencias entre la Orden de los Caballeros Templarios y la Francmasonería?
Son dos órdenes diferentes a lo largo del tiempo.
Los templarios eran cristianos, en cambio en la masonería no hay religión prevalente, es decir que para pertenecer a la orden masónica la religión no es mirada. Como ejemplo, José Martí era masón y era católico, y Gandhi era masón y era hindú. La Orden del Temple fue una orden medieval de carácter religioso y militar cargada de tintes legendarios, nacida después de la primera cruzada. En la masonería una de las leyendas más importantes de la orden masón o Francmasonería atribuye a Hiram Abif, mítico arquitecto del Templo de Salomón en Jerusalén, la fundación de la orden masónica.
De las distintas ramas y múltiples sistemas a que ha dado origen la divergencia de opiniones que existen con respecto al origen de la Francmasonería, dos han tenido el privilegio de predominar, si no en absoluto, de una manera tan absorbente y avasalladora cuando menos, que durante largo tiempo han hecho enmudecer a todas las demás. Una de ellas es la rama bíblico-simbólico-filosófica que atribuye el origen de la Francmasonería a la construcción del célebre Templo de Salomón y la otra, místico- caballeresca, que concede este privilegio a la no menos célebre y renombrada Orden de los Templarios. Esta última adquirió tal preponderancia durante la segunda mitad del siglo XVIII, que todos los demás sistemas se vieron postergados y reducidos al silencio y la inacción en los principales Estados del Continente Europeo.
Grandes y empeñadas controversias se han mantenido durante muchísimos años en pro y en contra de esta Orden y de la verdad de las acusaciones de que fueron objeto. Esta cuestión parecía haberse olvidado ya por completo, cuando a mediados del siglo XVIII, por instigación de los jesuitas según afirman ciertos autores, resucitóse de nuevo esta cuestión, poniéndose formal empeño por parte de muchos en defender la memoria de los Templarios.
A fines del siglo XVII, se descubrió en Alemania en el sepulcro de un Templario, muerto antes de la persecución de la Orden, una especie de talismán en el que están trazados varios signos gnósticos, como la escuadra y el compás; la esfera celeste; una estrella de cinco puntas, llamada el pentágono de Pitágoras, adoptado también por los Ophitas, y por último, las ocho estrellas del ogdoade gnóstico.
Prescindiendo de las numerosísimas versiones históricas que circulan respecto a tan controvertida materia, es opinión unánimemente admitida hoy por todos los escritores eruditos e imparciales, que la intervención de los Templarios en la Francmasonería, es hija de la fantasía del escocés Miguel Ramsay, creador de los grados de Escocés, Novicio y Caballero del Templo o Templario, en los que por primera vez se lanzó el considerar a la Orden de los Templarios, como fuente y origen de la Francmasonería. 14 de Febrero, 2008.
La Absolución de los Templarios
Caballeros templarios saliendo impetuosamente de Jerusalén para defenderla (arriba, en el centro). Obsérvese a la derecha (arriba) del círculo de la ciudad de Jerusalén, el barrio de los templarios con el Templo de Salomón destacado y también la vestimenta del caballero que monta el caballo blanco (la figura que más se destaca en la escena), con su cota, su estribo plenamente extendido y la silla elevada para ofrecer más seguridad durante la carrera, una característica típica de la caballería medieval. Esta iluminación muestra el avance organizado de la caballería templaria, un rasgo típico de su forma de combate, muy distinto del común de la caballería medieval. En resumen, los templarios eran entendidos en la perspectiva jerosolimitana. En: Miniatures - Nort-western France (Monastery St. Bertin?), c. 1200 (Added text: c. 1290-1300)
El 25 de Octubre del año pasado se publico en la "Sala vieja del Sinodo" en el Vaticano, el documento "Processus contra Templarios", edicion rigurosamente limitada a 799 ejemplares con un valor de 5900 Є cada uno.
La obra se basa en el "Pergamino de Chinon" y contiene los actos del juicio inquisitorio que se llevo a efecto en la ciudad de Chinon, diócesis de Tours, Francia. El documento fue escrito entre el 17-20 de Agosto de 1308. En este juicio se destruyo la orden de caballería de los monjes guerreros, fundada en el año 1118.
Ahora se necesita un poco de explicación de la historia y de la terminología.
Los Caballeros Templarios o La Orden del Temple fue una orden medieval de carácter religioso y militar cargada de tintes legendarios, nacida después de la primera cruzada. Fue fundada en Jerusalén, en 1118 por nueve caballeros franceses, con Hugo de Payens a la cabeza.En sus inicios su denominación oficial fue Orden de los Pobres Caballeros de Cristo; pero más tarde fueron conocidos comúnmente como Caballeros templarios o Caballeros del Templo de Salomón, denominación surgida al recibir autorización de instalarse en una parte del antiguo templo de Salomón. La designación de Orden del Temple es la traducción al francés de la denominación en latín, siendo muy extendida dados los amplios lazos Templarios con Francia.
El otro concepto que debemos aclarar es el de los Templarios modernos. Estos han sido descritos por la enciclopedia Wikipedia como una Orden filantrópica internacional, asociada con la Francmasonería. Su nombre completo es: La Orden religiosa, militar y masónica unida del Templo y de St. John de Jerusalén, Palestina, Rodos y Malta. En la mitad del Siglo XVIII los Masones empezaron a incorporar símbolos y tradiciones de los Caballeros Templarios medievales. Andrew Michael Ramsey, conocido como "Caballero Ramsey" prominente Masón Escocés, siendo Canciller de la Gran Logia Masónica de Paris, presento el año 1737 su celebrada oración en la cual atribuyo falsamente el origen de la Francmasonería a los Caballeros Templarios, más bien que a la Masonería operativa. No existe realmente evidencia histórica que pueda ligar entre estos y el Templarismo Masónico.
No les hablare hoy de este selecto grupo.
Hubo en Palestina a principios del siglo XX un grupo de cristianos alemanes que se titulaban Templarios y establecieron pequeñas colonias en Jaffa, Tel Aviv y Haifa. Cuando estallo la segunda Guerra Mundial los ingleses los expulsaron por ser nacionales enemigos. No regresaron. Los de Jaffa habían ocupado las casas de Madera construidas por un grupo de mormones que llegaron de Maine en el siglo XIX. Algunos eran masones. Una de las casas ha sido refaccionada y es ahora un museo de la colonia Americana en Jaffa
El primer "Gran Maestro" de los Caballeros Templarios fue C, quien se dirigió al Rey Balduino II de Jerusalén con ocho Caballeros más, dos de ellos hermanos carnales y el resto, familiares de sangre o por matrimonio. El grupo se organizó a solicitud del Papa Urbano II.
Después de veintidós Grandes Maestros de los Caballeros Templarios, a fines del Siglo XII, estos quedaron sin peregrinos a quien proteger. Por alguna obscura razón, su último Gran Maestro, elegido el 20 de Abril de 1292, no fue capaz de hacer sobrellevar las visicitudes de la Inquisición a las que fueron injustamente acusados. Prometió reformar la Orden y ajustarla a las condiciones de la Tierra Santa, pero fracasó. Sus Caballeros fueron culpados de herejía, idolatría y perversión sexual. Fueron acusados además de "negar a Cristo, escupir tres veces sobre la cruz y besar los traseros de otros hombres". La explicación de los Templarios fue que esos actos simulaban la clase de humillación y tortura a las que el Cruzado podría ser sometido si fuere aprisionado por los Sarracenos. Se les enseño a abusar de su propia religión solo con la mente pero no con el corazón. A pesar de estas explicaciones, fueron culpados de Perjurio siendo acusados de ejercitar ritos iniciativos que anteponían la Orden a la Iglesia Romana
La monarquía francesa reaccionó desencadenando un autentico mecanismo de chantaje que obligaría poste-riormente al Papa Clemente V al ambiguo compromiso aprobado en 1312 durante el Concilio de Viena: al no poder oponerse a la presión ejercida por el rey de Francia Felipe el Hermoso, que imponía la eliminación de los templarios, el Papa elimino la Orden de la realidad de la época sin condenarla ni abolirla, sino mas bien aislándola en una especie de "hibernación" gracias a un hábil artificio del derecho canónico. Tras haber declarado expresamente que el proceso no había probado la acusación de herejía, Clemente V suspendería la Orden de los Templarios mediante una sentencia no definitiva dictada por la necesidad superior de evitar un gran peligro para la Iglesia, con la prohibición bajo pena de excomunión de continuar usando el nombre y los signos distintivos.
Jacques de Molay, un noble de baja alcurnia de Borgoña, fue el último Gran Maestro de los Caballeros Templarios. Después que el Gran Maestro y todos los otros jefes de la Orden juraron formalmente su herejía, Clemente V preparo un documento de absolución. El Papa todavía estaba convencido de poder garantizar la supervivencia de la Orden religiosa y militar y eliminar de entre los frailes guerreros la infamia de la excomunión en la que se habían enredado solos al admitir que habían renegado de Jesucristo bajo las torturas del inquisidor francés. Después del acto de penitencia y solicitud de perdón, el Papa escribe la carta de absolución, documento llamado "Pergamino de Chinon" ya que fue escrito en la ciudad de Chinon, diócesis de Tours, el mes de Agosto de 1308. La Orden fue suprimida «con norma irreformable y perpetua» (bula Vox in excelso, 22 de marzo de 1312). En este documento el Papa ordena absolver y no disolver la Orden de los Caballeros Templarios, acto inteligente tomado para castigar pero no eliminar esa Orden importante para la Iglesia.
El Pergamino de Chinon es único, de grandes dimensiones (70 X 58 cm.) originariamente con sellos pendientes de los tres legados apostólicos que formaban la Comisión especial apostólica "ad inquirendum" nombrada por el Papa Clemente V. Su estado de conservación es discreto, aunque tiene vistosas manchas violáceas debidas al ataque de las bacterias.
Algunos Supuestos
- aceptar combate contra herejes por más que fueran tres contra uno;
- responder entre no herejes, solo después de haber sido atacados tres veces;
- ante una falta, ser flagelados tres veces;
- comer carne, oir misa y dar limosna tres veces por semana;
- comulgar tres veces al año.
Por otra parte la Orden concentró su acción laica en tierras celtas, además de los Santos lugares, tratando tal vez de vincular la Nueva Caballería creada por él con la tradición celta. Es bastante comentado el raro hecho de que el Rey Balduino, a poco de llegar los 9 primitivos caballeros, les ofreciera como alojamiento nada menos que el Templo. Y poco después los dejara como únicos ocupantes. Uno de los supuestos más firmes es que la misión secreta impuesta por San Bernardo era la búsqueda del Arca de la Alianza y las Tablas de la Ley, que suponía enterradas en el Templo. Es probable que con las "Tablas de la Ley" hubiera copias de algunos documentos sagrados egipcios que Moisés (sacerdote egipcio iniciado) se habría llevado en el éxodo, tal vez motivo determinante de la encarnizada persecución del Faraón.
Diez años después de su llegada, los caballeros regresan y cinco de ellos asisten al Concilio. Atrás, en el Templo de Jerusalén no ha quedado piedra sin remover. Hasta han recuperado una caballeriza subterránea de Salomón, que podía alojar 2000 caballos. No hay constancia de que hayan encontrado el Arca y la Ley... pero a partir de su regreso parecen adquirir de pronto los suficientes conocimientos arquitectónicos como para dejar de lado la pesada construcción románica y pasar a la catedral gótica. Se invierten los principios: la bóveda románica ejerce peso sobre los (robustos) muros mientras que la bóveda gótica, gracias a los arbotantes se proyecta hacia arriba y los muros se alivianan y permiten ventanas. Louis Charpentier señala que en el portal norte de la Catedral de Chartres existe un pequeño relieve con la leyenda: " Hic dimittitur Archa Cederis", que traduce como "Aquí queda depositada, obrarás según el Arca".
Algunos Misterios
En el sur de Francia, cerca de Niza, sobre una montaña, en zona próxima a la ocupada por los cátaros, se ha encontrado una pirámide a escala, réplica exacta de la de Cheops. La escala (1/32) por otra parte es la utilizada actualmente en auto y aeromodelismo. La pirámide recibió el
nombre de pirámide de Falicon. Fue construida alrededor de 1260 por los caballeros templarios derrotados en la cruzada en que San Luis fue hecho prisionero en Damieta y el Temple pagó su rescate. ¿Cuál fue el significado, objeto o destino de su construcción? ¿De dónde obtuvieron los templarios los datos para su exacta reproducción a escala?
Hechos, Supuestos y Misterios
Apogeo
Como se sabe, del árbol caído todos hacen leña. En este punto de los hechos desde diversos ángulos se disparaba sobre los templarios. Cada uno trataba de obtener su parte del botín. Si bien Felipe quería los bienes de la Orden, la Inquisición quería la Orden misma. Como ante la muerte de Bubulina en "Zorba el Griego", el clero secular, la Orden de los Caballeros de San Juan, el propio Papa, el mísero alcalde de aldea, todos como buitres hambrientos apuraban el trámite para tratar de conseguir algún bien del Temple, algún despojo, por chico que sea, algo..., por amor de Dios, algo de todo lo que tienen... No obstante el más despechado había sido el propio Felipe que encabezó los allanamientos a la casa del Temple en París, depósito principal de los tesoros, sin encontrar más que papeles y objetos sin valor, aunque pudo rescatar sus propios pagarés. Siempre se murmuró que noches antes partieron tres enormes carretones de heno, tal vez salvando el verdadero tesoro.
Y después llegaron las guerras, el hambre y la peste; el galope sombrío de los jinetes del Apocalipsis. Se cuenta que cuando la cabeza de Luís XVI rodó, de la multitud salió el grito: - Jaques de Molay, por fin has sido vengado!! Es que se decía que Felipe había reencarnado en Luís XVI.
Los Templarios
Conozcamos parte de su historia, trataremos de ver los distintos ángulos de algunos especialistas, cabe resaltar que como muchos ignoramos su historia, hoy nace la necesidad de profundizar su historia. Tema por demás puede ser reflexionado en el avance de la Nueva Era.
Caballeros Templarios
Varios años antes del reafirme de Jerusalén en 1099, un grupo de caballeros había actuado como guías y protectores de los cristianos que peregrinaban a través de las tierras santas. Esos Caballeros vivieron en una hostería cerca del Templo de Solomón en Jerusalén en el momento de la Primera Cruzada. De ellos, cuyos nombres eran Hughes de Payns y Godofredo de Saint Omer, nace la idea de incorporar a los caballeros formalmente como un orden en 1119, tomaron el nombre de Orden de los pobres Caballeros de Cristo, pero fueron conocidos mas popularmente como Los Caballeros del Templo de Solomón o Los Caballeros Templarios. San Bernardo tomó la causa del Templarios con entusiasmo, y Hughes de Payns fue el primer Gran Amo de la Orden. La idea de los monjes-caballeros militares se recibió con gran entusiasmo. Un grupo de Templarios recorrió Francia y Inglaterra para reclutar a los miembros, y también para solicitar regalos de dinero y propiedad para que la Orden pudiera apoyar sus actividades militares en la Tierra Santa.
La Orden fue reconocido formalmente por la Iglesia en el Concilio de Troyes en 1128, y San Bernardo de Claraval, el clérigo más influyente de la época, fue comisionado para escribir los reglamentos por la que ellos se debían regir. Invirtieron grandes sumas de dinero en la construcción de una cadena de castillos masivamente fortificados, algunos de los cuales nunca fue capturado por el enemigo, pero fueron abandonados cuando los caballeros se retiraron de Palestina en 1291. Fueron famosos por la ferocidad en la lucha. Después de la Batalla desastrosa de Hattin en 1187, Saladín tomó a prisionero aproximadamente 200 Templarios y Hospitalarios, incluyendo a ambos Grandes Amos, y dio orden de ejecutar a todos. Con Jerusalén en manos de los musulmanes su cuartel general se localizó sucesivamente, en Antioquía, Acre, Cesárea y por ultimo en Chipre.
Como los Caballeros Templarios enviaban regularmente dinero y suministros desde Europa a Palestina, desarrollaron un eficiente sistema bancario en el que los gobernantes y la nobleza de Europa acabaron por confiar. Se convirtieron gradualmente en los banqueros de gran parte de Europa y lograron debido a esto y a la exención del pago de impuestos y diezmos (no estaban sujeto a la ley secular, y sólo respondían al Papa), amasar una considerable fortuna. En 1307, sin embargo, el Rey Felipe IV se quiso adueñar de esa inmensa riqueza. Él y su canciller, Guillermo de Nogaret, confabularon para acusar a los Templarios de herejía y abolir la Orden.
Esto fue hecho; en 1307, todos los Templarios Franceses, incluido el gran maestre francés Jaques de Molay, fueron arrestados (sólo trece escaparon) y se les "interrogó" bajo tortura o la amenaza de tortura. La conspiración tubo éxito y todos los caballeros confesaron múltiples e increíbles crímenes que iban desde escupir u orinar en el crucifijo a sodomía.Después muchos caballeros retractaron sus confesiones pero era demasiado tarde; el daño a su reputación era renuentemente irreversible.
En 1312 el Papa Clemente V estaba de acuerdo en emitir una bula papal que suprimiese la Orden y sus miembros fueron quemados en la hoguera. El Papa pidió que las propiedades de los Templarios sean dadas a los Hospitalarios, pero aunque esto se hizo en Alemania, en Francia y Inglaterra la mayoría fueron a la corona.